domingo, 25 de novembro de 2012

La revolución cívica de Islandia: un mito en el que merece la pena creer (Fonte: Unión Europea)

"Apenas tres meses después de que estallase la burbuja financiera, en otoño de 2008, Islandia tumbó a su Gobierno y dejó quebrar a sus bancos. En poco más de dos años, el país de 320.000 habitantes se negó dos veces y por referéndum a hacerse responsable de una deuda bancaria de 6.700 millones de euros. Se trata de la deuda de Icesave, filial de uno de las principales entidades del país, que dejó a cerca de 400.000 clientes británicos y holandeses sin un céntimo de lo invertido. El primer ministro al mando del Ejecutivo hasta que estalló la crisis fue después juzgado y condenado por negligencia al haber permitido una burbuja financiera sólo comparable en Europa a la de Irlanda. Hace tan solo unas semanas, dos tercios de los islandeses respaldaron una propuesta de reforma constitucional, elaborada por ciudadanos anónimos y gestada con aportaciones de miles de ciudadanos en las redes sociales. Entre las mociones apoyadas masivamente están las de devolver la propiedad de los recursos naturales al Estado o facilitar la celebración de referéndums a propuesta ciudadana.
¿Un mito? Sí, un mito en el que merece la pena creer.
Como todo mito, se basa en aspectos reales como los que encabezan este artículo. Porque todos esos hechos ocurrieron. Ahora los ordena Elvira Méndez Pinedo en el libro La Revolución de los vikingos: La victoria de los ciudadanos (Planeta, 15 €, 227 páginas), sobre el que conversó con El HuffPost. Sin embargo, del mismo modo que hasta otoño de 2008 el espectacular desarrollo económico era producto del delirio financiero, es un error pensar que la rebelión cívica ha evitado la crisis en sí o alguno de sus efectos más dramáticos..."

Integra disponível em http://www.huffingtonpost.es/2012/11/22/la-revolucion-ciudadana-e_n_2176039.html?utm_hp_ref=spain

Nenhum comentário:

Postar um comentário